
Todos los días no encontramos proyectos tan peculiares y bonitos como fue este proyecto de hogar en el que el estanque ZEN y una cascada artificial tenían que ser los protagonistas. En primer lugar, llevamos a cabo una instalación domótica, actualizamos la red de datos y añadimos nuevos puntos WIFI.
Para activar la cascada artificial se ha implementado un riguroso sistema de control y accionamiento con diferentes escenas.
En el vestidor se ha integrado el control de un estanque ZEN que se adapta a los estamos de animo. El efecto visual se une a la iluminación y el audio para que toda la instalación trabaje en sintonía y aporte la tranquilidad y relajación necesaria al finalizar un día intenso o una programación más activa para empezar el día con mucha energía.